Entre las posibilidades estructurales del canon musical está el llamado "canon cancrizante o retrógrado"; donde la melodía principal se superpone a otra que es exactamente igual pero que procede de forma retrógradada desde el final, es decir el canon mantiene una simetría tal que si se tocara de forma invertida el único cambio sería que una de las voces tomaría la melodía de la otra y viceversa.
El Crab Canon de la Ofrenda Musical de J.S. Bach se interpreta de principio a fin y del fin al principio, formando un canon (las voces se persiguen sin alcanzarse). Por su caracter especular se convierte en un estilo plenamente conectado con la estética barroca, tan aficionada a simetrias espirales, galerias de espejos y juegos de simetria.
En el ejemplo del vídeo de arriba, la partitura se monta sobre una banda de Moebius, una forma geométrica muy curiosa con ánimo de infinitud. Está muy bien explicado en este post de Aníbal de la Torre, en el que nos muestra otro similar de Guillaume de Machaut.
Una variante muy curiosa es el canon de mesa (aquí hay dos ejemplos de Mozart): los dos músicos leen la misma particella. Uno de ellos la toca desde la última nota hacia la primera (como era en el canon cancrizante de Bach) pero además leyendo la hoja cabeza abajo. Como sugiere el nombre del tipo de canon, se pone la hoja en una mesa y cada uno de los dos intérpretes la toca leyéndola desde un extremo de la misma mesa.
4 comentarios:
Maria la verdad es que no me habia puesto a ver el video de Bach solo habia leído la entrada y ahora que lo he visto... me queda mucho más claro!! además es muy curioso, me ha gustado mucho :)
¡Me alegro! :)
Excelente.
Gracias, Marion.
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